viernes, 14 de agosto de 2015

LA DIVISIÓN DE LA ATENCIÓN

GNOSIS
DIVISIÓN DE LA ATENCIÓN
Por: samael aun wor

En las escuelas, colegios y universidades, se les enseña a los estudiantes a poner atención en las clases, y los alumnos y alumnas ponen atención para evitarse el regaño, el jalón de orejas, el golpe con la férula o con la regla, etc., mas desgraciadamente no se les enseña a comprender, realmente, lo que es la atención consciente.

Por disciplina, el estudiante pone atención y gasta Energía Creadora, muchas veces en forma inútil.

Nosotros comemos y bebemos, y todos los procesos de la digestión, en el fondo, son procesos de sutilización, en los que las materias groseras se convierten en materias y fuerzas sutiles.

La Energía Creadora es el tipo de materia y de fuerza más sutil, elaborada por el organismo.

Si sabemos poner atención consciente, podemos ahorrar Energía Creadora. Desafortunadamente, los maestros y maestras no les enseñan a sus discípulos lo que es la atención consciente.

Doquiera dirijamos la atención, gastamos Energía Creadora.

Podemos ahorrar esa Energía si dividimos la atención, si no nos identificamos con las cosas, con las personas, con las ideas.

Cuando nosotros nos identificamos con las personas, con las cosas, con las ideas, nos olvidamos de Sí Mismos y entonces perdemos la Energía Creadora en forma lastimosa.

Es urgente saber que necesitamos ahorrar la Energía Creadora para despertar Conciencia, y que la Energía Creadora es el potencial viviente, el vehículo de la Conciencia, el instrumento para despertar Conciencia.

La atención consciente excluye eso que se llama "identificación".

Cuando nos identificamos con las personas, con las cosas, con las ideas, viene la fascinación y esta última produce el sueño en la Conciencia.

Hay que saber poner atención sin identificación.

Cuando ponemos atención en algo o en alguien, y nos olvidamos de Sí Mismos, el resultado es la fascinación y el sueño de la Conciencia.

Observad cuidadosamente a un cineasta: se encuentra dormido, todo lo ignora, se ignora a Sí Mismo, está hueco, parece un sonámbulo, sueña con la película que está viendo, con el héroe de la película.

La atención dividida en tres partes: Sujeto, Objeto y Lugar, es de hecho atención consciente.

Cuando no cometemos el error de identificarnos con las personas, las cosas, las ideas, etc., ahorramos Energía Creadora y precipitamos en nosotros el despertar de la Conciencia.

El hombre que se olvida de Sí Mismo ante un insultador, se identifica con él, se fascina, cae en el sueño de la Conciencia, y entonces hiere o mata y va a la cárcel inevitablemente.

Aquel que no se deja fascinar por el insultador, aquel que no se identifica con él, aquel que no se olvida de Sí Mismo, aquel que sabe poner atención consciente, sería incapaz de darle valor a las palabras del insultador, o de herirle, o de matarle.

Todo los errores que el ser humano comete en la vida, se deben a que se olvida de Sí Mismo, se identifica, se fascina y cae en el sueño.

Hay que despertar, amigos, y aprender a vivir alertas, de momento en momento.

Es impostergable dividir siempre la atención en tres partes:

Primera, Sujeto; segunda, Objeto; tercera, Lugar.

Sujeto: no olvidarnos de Sí Mismos, auto-vigilarnos en cada segundo, en cada momento; esto implica el estado de alerta, en relación con nuestros pensamientos, gestos, acciones, emociones, hábitos, palabras, etc.

Objeto: minuciosa observación de todos aquellos objetos o representaciones que por medio de los sentidos, llegan a la mente.

No debemos jamás identificarnos con las cosas, porque así es como cae uno en la fascinación y el sueño de la Conciencia.

Lugar: observación diaria de nuestra casa, de nuestra recámara, como si fuera algo nuevo.

Preguntarnos diariamente a sí mismos: ¿por qué he llegado yo aquí, a este lugar, a este mercado, a esta oficina?, etc., etc., etc.

Estos tres aspectos de la división de la atención, en modo alguno constituyen capítulo aparte, ni algo diferente al proceso de disolución del "yo".

Incuestionablemente, necesitamos auto-estudiarnos, auto-observarnos de momento en momento, si es que de verdad queremos descubrir nuestros propios defectos psicológicos, pues en relación con nuestros semejantes, los defectos escondidos afloran espontáneamente, naturalmente.

No se trata meramente de estar auto-observando los pasos que damos ni las formas del cuerpo, etc.

La vigilancia sobre sí mismos implica estudio silencioso y sereno de todos nuestros procesos psicológicos, íntimos: pasiones, pensamientos, palabras, etc.

La observación de las cosas, sin identificación, nos permitirá conocer los procesos de la codicia, del apego, de la ambición, etc.

Es irrefutable que a un codicioso le costará mucho trabajo no identificarse con un anillo de diamantes, o con unos cuantos billetes de banco, etc.

La observación sobre los lugares, nos permitirá conocer hasta donde llegan nuestros apegos y fascinaciones en relación con lugares diversos.

Es pues, este triple juego de la atención, un ejercicio completo para auto-descubrirnos y despertar Conciencia.


Samael aun weor

BUDHISMO ZEN

GNOSIS
BUDHISMO ZEN
Por: samael aun weor

¿Por qué la última Verdad-Prajna que el Budhismo Zen quiere indicar es tan indefinible, abstracta e inasible?

Definir significa realmente poner límites intelectivos a, o declarar el sentido de una cosa determinada.

Asir, en sentido empleado aquí, significa comprender algo y retenerlo en la memoria.

Como el mismo acto de definir consiste obviamente en encerrar a algo dentro de un cierto límite, no puede necesariamente no ser finito, angosto y restrictivo en su naturaleza; así mismo, como Comprender significa asir algo mentalmente, pero no todo, ha de ser igualmente limitativo y exclusivo.

La última Verdad-Prajna que la escuela Zen quiere indicar no puede ser en ningún modo algo angosto, finito o exclusivo; debe ser algo vasto, universal e infinito, algo que todo lo incluye y alcanza, algo más allá de la definición y de la designación.

La misma palabra "definir" sugiere ostensiblemente un dedo humano que señala a un objeto determinado, y la palabra "Asir" una mano que retiene algo y no suelta.

Dada esta lamentable limitación y este aferramiento, profundamente ahincado en el racionalismo del ser humano intelectual, no es en modo alguno sorprendente que la libre y omni-incluyente verdad-prajna se torne realmente en algo evasivo que siempre está eludiendo misteriosamente a todo pensador.

Iluminación. Esta palabra grandiosa en esencia y en potencia, se usa en este capítulo para indicar enfáticamente la experiencia mística trascendental que consiste en experimentar el Tao, la Verdad Zen, lo Real.

No es suficiente comprender algo, necesitamos captar, aprehender, capturar, su íntima significación.

El sexto patriarca preguntó al Bodhidharma: -"¿Cómo es posible alcanzar el Tao?". El Bodhidharma respondió:

-"Exteriormente, toda actividad cesa; interiormente, la Mente deja de agitarse. Cuando la Mente se ha convertido en un muro, entonces adviene el Tao".

Es urgente saber que el Zen japonés, es el mismo Dhyana indostánico, el Jhana Pali, el "Ch'an na" chino: una forma extraordinaria del Budhismo Mahayana.

Es incuestionable que los estudios y prácticas Zen nos permiten captar el íntimo significado de las Enseñanzas Budhistas preconizadas por la escuela Mahayana, antítesis maravillosas y complemento a la vez de la Escuela de Auto-Realización Intima Hinayana.

El Vacío Iluminador resulta imposible de describir con humanas palabras.

No es definible o descriptible.

Como ha dicho el Maestro Zen Huai Jang: "Cualquier cosa que diga fallará en el punto principal".

La enseñanza budhista sobre el Vacío es comprensiva y profunda, y requiere mucho estudio antes de ser entendida.

Solo en ausencia del Ego podemos experimentar en forma directa el Vacío Iluminador.

Endiosar a la Mente es un absurdo porque ésta en sí misma es tan solo un calabozo fatal para la Conciencia.

Afirmar que la Mente es el Buda decir que es el Tao, resulta disparatado porque el intelecto es tan sólo una jaula para la Conciencia.

La mística experiencia del Vacío Iluminador se realiza siempre fuera del terreno intelectual.

La iluminación budhista nunca se consigue desarrollando la fuerza mental, ni endiosando la razón; por el contrario, se logra desatando cualquier vínculo que nos ate a la mente.

Solo liberándonos del calabozo intelectual podremos vivenciar la dicha del Vacío Iluminador, libre y enteramente insubstancial.

El Vacío es sencillamente un término budhista claro y preciso que denota la naturaleza no substancial y no personal de los seres, y una señal de indicación del estado de absoluto desprendimiento y libertad fuera del tiempo y más allá de la Mente.

Bebed el Vino de la Meditación en la Copa deliciosa de la Perfecta Concentración.

samael aun weor

BUDHISMO MAHAYAMA Y LA ESCUELA HINAYAMA

GNOSIS
BUDHISMO MAHAYAMA Y LA ESCUELA HINAYAMA
Por: samael aun weor

(VISION Y ACCIÓN)

La realidad (Li en chino) puede verse de manera repentina, pero la Materia (Shih en chino) debe cultivarse en forma progresiva y ordenada.
                 
En otras palabras, tras haber llegado al éxtasis, hay que cultivarlo hasta su completo desarrollo y madurez.

Así, el trabajo esotérico consiste en dos aspectos principales, la visión y la acción.

Para tener una visión hay que subir hasta lo más alto de la montaña y mirar desde allí; para iniciar el viaje hay que descender hasta el fondo del abismo y empezar a caminar desde allí.

Aunque el templo Zen, que es una forma maravillosa del Budhismo Mahayana, esté sostenido por los dos pilares de la "Visión" y la "Acción", es ostensible que pone muy especial énfasis en el primero.

Esto está reconocido claramente por el Guruji, I Shan, quien dijo: "Tu Visión y no tu Acción es lo que me importa".

Es por esto que los Maestros Zen ponen todo el énfasis en el Extasis, en el Samadhí, en el Satori, y concentran todos sus esfuerzos en llevar directamente a sus discípulos o chelas hacia él.

La escuela tibetana Hinayana es diferente y aunque sus dos columnas torales son también la "Visión" y la "Acción", es incuestionable que pone especial solemnidad en lo segundo y lucha incansablemente por llevar a sus devotos a la Novena Esfera.

No está de más en este capítulo afirmar que los aspirantes de la escuela Mahayana anhelan de verdad y con ansia infinita la experiencia directa del Vacío Iluminador.

De ninguna manera exageramos conceptos si afirmamos con cierta vehemencia que los discípulos de la escuela Hinayana trabajan tenazmente en la Forja de los Cíclopes (el Sexo), con el propósito inteligente de lograr la Auto-Realización Intima del Vacío Iluminador.

Cuando la mente está quieta, cuando la mente está en silencio, por dentro y por fuera y en el centro, adviene la Experiencia Mística del Vacío; empero, es obvio que Auto-Realizarlo es algo muy diferente.

El Vacío no es muy fácil de explicar. Ciertamente os digo que no es definible o descriptible.

El lenguaje de los seres humanos que pueblan la faz de la Tierra, ha sido creado para designar cosas y sentimientos existentes; no es adecuado para expresar aquello que está más allá del Cuerpo, de los Afectos y de la Mente.

El Vacío Iluminador no es asunto de conocer o no conocer, experimentarlo directamente es lo indicado.

"Visión" y "Acción" se complementan mutuamente. Las dos escuelas citadas resultan indispensables.

Ver con lucidez infinita solo es posible en ausencia del Ego, del Mí mismo, del Sí mismo, disolverlo es urgente.

Acción Consciente es el resultado del trabajo progresivo en la Forja de los Cíclopes.

En el estudio esotérico del Zen (forma maravillosa de la escuela Mahayana) existen dos términos chinos muy interesantes: "Chien" y "Hsing".

Utilizado como verbo, Chien significa ver, o mirar; utilizado como sustantivo significa la Vista, el Entendimiento, o la Observación.

Hsing significa la Práctica, la Acción, el Trabajo Esotérico. También puede usarse como verbo o sustantivo.

"Chien", en su sentido más íntimo, significa todo el entendimiento místico de la enseñanza budhista; pero, en el Zen, no solo denota el entendimiento claro y evidente de los Principios y de la Verdad-Prajna, sino que también implica la Visión Despierta que surge de la Experiencia "Wu" (Satori, Extasis, Samadhí).

"Chien" en este sentido trascendental y divinal, puede entenderse como realidad vista o una visión de la realidad. Aunque esto signifique ver la Realidad, no implica la posesión o el dominio de la misma.

"Hsing", el trabajo fecundo y creador en la Fragua Encendida de Vulcano, es fundamental cuando se quiere la posesión y el dominio de lo Real.

samael aun weor


miércoles, 12 de agosto de 2015

EL GRANDIOSO PODER DE LA QUIETUD MENTAL

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EL GRANDIOSO PODER DE LA QUIETUD MENTAL
Por: samael aun weor

Hace ya muchos siglos estuve yo reencarnado en la China, durante la época histórica de la Dinastía Chou. Entonces me llamé CHOU LI y estuve afiliado a la orden del Dragón Amarillo.

El Logos Bendito me ha ordenado enseñarle a la humanidad de esta época, las SIETE JOYAS DEL DRAGÓN AMARILLO.
                      
Las iré enseñando conforme vaya encontrando elementos que las comprendan.

He ahí pues el punto difícil de la cuestión...

En aquella edad, los ascetas, dentro de la sala de Meditación, trabajábamos intensivamente.

Entonces, sabíamos muy bien, que existen 49 niveles subconscientes en la mente.

Queríamos todos llegar a la quietud y al silencio absoluto de la mente.

Nos preocupábamos intensivamente por experimentar el vacío iluminador, Y no ignorábamos, que “para poder subir hay que bajar, y que a toda exaltación le precede siempre una terrible y espantosa humillación”...

Esto de que llevar la mente a la quietud y al silencio, suele ser, realmente, mis caros hermanos, bastante difícil.

No se trata de poner mente en blanco, como suponen algunas gentes superficiales; la cosa va más lejos...

De qué serviría, por ejemplo, que diésemos la orden a este grupo de poner Mente en blanco, y que luego exclamarán los hermanitos para sus adentros: “¡Ya tengo la Mente en blanco!”

Eso sería verdaderamente estúpido, ¿verdad?

No sería inteligente.

Llegar a la quietud y silencio de la Mente es algo muy distinto, a lo que se llama “Mente en blanco”.

Se requiere, ante todo, trabajar en 49 Niveles Subconscientes.

Es bastante difícil, ¿verdad?

Téngase en cuenta, que dentro de cada uno de nos, dentro de nuestro mismo cuerpo planetario, tenemos una suma de agregados psíquicos inhumanos.

Estos controlan completamente al organismo y se suceden unos a otros.

Ahora se explicaran, cada uno de ustedes, por qué motivo el “animal intelectual” equivocadamente llamado “Hombre”, cambia a cada instante a cada momento:

Aquél que hoy jura amor eterno a la Gnosis, mañana es desplazado por otro que nada tiene que ver con tal juramento.

Aquél que jura amor eterno a una mujer, más tarde es desplazado por otro agregado inhumano que nada tiene que ver con dicho juramento, y entonces, el sujeto se retira.

Lo que hoy pensamos, mañana no es lo mismo; hoy tenemos una idea mañana otra.

Conforme los distintos agregados psíquicos inhumanos van controlando la máquina del “animal intelectual”, va pasando por distintos cambios.

Ésa es la cruda realidad de todo esto.

Así pues, el “animal intelectual” es una máquina, que ahora la controla un determinado agregado y que al rato, y más tarde otro.

No hay, pues, en el “animal intelectual”, un individuo responsable.

No está de más recordarles, que tales agregados personifican a nuestros defectos de tipo psicológico; y son tantos los defectos que “aunque tuviéramos gargantas de acero y mil lenguas para hablar, no alcanzaríamos a enumerarlos a todos detalladamente”.

Llegar, pues, a la quietud y silencio de la Mente, obviamente, es difícil, ¿verdad?

Se trata de que todos los agregados psíquicos inhumanos se queden quietos.

¿Y creen ustedes que ésa es tarea fácil?

Supongamos que logremos aquietarlos en el Nivel meramente Intelectivo; eso no sería todo, eso no sería suficiente como para llegar al SATORI Budista; eso no sería suficiente como para llegar a experimentar el TAO; y eso no sería suficiente como para llegar a vivenciar, en sí mismo, el Vacío Iluminador.

Así pues, el trabajo es, repito, dispendioso: se necesita lograr aquietar a la Mente en todos y cada uno de los 49 Niveles.

Mas cuando hablo de Mente hay que saber entender, porque existe el craso error de suponer, que el “animal intelectual” equivocadamente llamado “Hombre”, tiene ya una mente individual, un manas concreto, completamente organizado; y eso es absolutamente falso.

El “animal intelectual”, el bípedo tricerebrado o tricentrado no tiene mente individual; tiene mentes, y eso es diferente.

Cada uno de los agregados psíquicos inhumanos que hay adentro es, ciertamente, una mente por sí misma.

Así pues, son millares las mentes que posee el humanoide.

Pero voy a llevarlos a algo concreto, a que me lo entiendan bien: Cuando ustedes han jurado amor a alguien, lo han hecho sinceramente, ¿verdad?

Sin embargo, no los creo tampoco unos santitos.

Algunas veces puede que no lo hayan hecho tan sinceramente, pero lo juraron; sea como sea lo han jurado: ¡Amor eterno!

En ese momento ustedes se han sentido ustedes; en ese momento ustedes han podido decir: “Yo te amo, yo te juro amor eterno”, etc., etc.

Pero y después, ¿qué tal?

Cuando ya ése que juró ha sido desplazado, por otro agregado psíquico que no tiene velas en el entierro, ¿en qué quedó el juramento, las palabras de amor?

Pero cuando el que juraba, juraba, se sentían ustedes siendo ese Yo que juraba; y podrían en ese instante asegurar que no había ningún otro Yo que jurara.

Se sentían ustedes el último de los Yoes y el primero de los Yoes, y el auténtico y el legítimo; más después se han convencido de que, aquél que juraba, no era uno sino de los tantos yoes, ¿verdad?

Ése que pensaba tantas maravillas cuando juraba, no es el mismo que después desplazó a ése; no es el mismo que después juro amor a otra persona diferente; no es el mismo y nada tiene que ver con tal juramento.

Sin embargo en aquella ocasión, el que juraba, juraba y pensaba a su modo.

Entonces, es obvio que tenemos muchas mentes, ¿verdad?, que no existe una mente realmente Individual, que hay que crearla (eso es otra cosa).

Y es obvio que se pueden crear mediante la transformación del hidrógeno sexual si-12.

A base de incesantes transmutaciones, puede uno darse el lujo de crearse una mente Individual para su uso personal.

Pero las gentes normalmente no tienen una mente individual.

Cada uno de sus agregados psíquicos (o en otros términos, cada uno de sus yoes), tiene su mente propia.

Así pues, el “animal intelectual” tiene muchas mentes.

Piensen en lo que es aquietar a tantas mentes, y llevarlas al silencio completo y en 49 Regiones.

¿Creen ustedes que es cosa fácil? Es difícil, ¿verdad?

Dentro de cada uno de esos agregados psíquicos, o mejor dijéramos, dentro de cada una de esas mentes, está embotellada la esencia, la conciencia.

Urge desenfrascarla, desembotellarla, emanciparla, para que pueda experimentar, por sí misma, el Vacío Iluminador.

Entonces hay que hacerlo, ¿cómo?

En aquel tiempo (durante la Dinastía Chou, en China), nos ayudábamos con un instrumento musical, muy especial.

Desgraciadamente ese instrumento ha desaparecido.

Tal instrumento daba las 49 notas musicales (en síntesis forma el sonido nirioonosiano del universo.

El músico, el artista, el que ejecutaba, con aquel instrumento hacía resonar cada nota por separado.

Cuando vibraba la nota correspondiente al Segundo Departamento Subconsciente, nosotros, trabajábamos entonces en ese Segundo Departamento.

Y cuando hacía resonar la nota que correspondía al Tercer Departamento del Subconsciente, trabajábamos con el mismo; y cuando hacia resonar la nota 20, trabajábamos con tal zona; y cuando llegaba a la Región 49 (con la última de las notas), realizábamos el último de los trabajos, y la Mente quedaba quieta y en profundo silencio.

Es decir, primero bajábamos antes de subir.

Así los 49 Niveles quedaban absolutamente quietos; si la Mente en 49 Regiones quedaba en suspenso, obviamente, la Esencia se desenfrascaba, se emancipaba; y libre de toda clase de ataduras penetraba en el Vacío Iluminador.

Es bueno que ustedes sepan, que ése es el mismo santo okidanock, Omnipenetrante, Omnisciente, Omnicomprensivo.

Si en ese Vacío Iluminador están en las Leyes de la Naturaleza, entonces aquí, en este Mundo Físico, sólo vemos sucesión de causas y efectos.

Pero las Leyes en sí mismas, las Leyes de la Naturaleza, solamente podremos descubrirlas, tal cual son, en el Vacío Iluminador.

Aquí no vemos las cosas, como verdaderamente son, pero en el Vacío Iluminador, conocemos las cosas en sí mismas, “la cosa en sí”, como dijera el gran Filósofo de Königsberg, Don Emmanuel Kant..., “la cosa en sí”...

En el Vacío, la Esencia percibe con las facultades propias del Ser; y todo lo que percibe es transmitido a la humana Personalidad.

Resulta interesante saber, que en tales momentos, los centros motor y emocional se unen con el intelectual para tornarse receptivos.

Entonces aquello que la Esencia (en sí misma), está experimentando en Eso que es lo Real, en Eso que está mas allá del tiempo, en Eso que está mas allá del cuerpo, de los afectos y de la Mente, viene hasta la humana Personalidad, hasta el Centro Intelectual... Descripción: http://bibliotecagnostica.net/img/small/inaudible.gif

Y al pasar el éxtasis, el Satori de los Santos, el Samadhi, al regresar la Esencia al cuerpo físico, al cuerpo planetario, los recuerdos todos quedan, pues, en la Mente, en el entendimiento.

El problema para llegar, pues, a experimentar Eso que es lo Real, para llegar a vivenciar lo que es el Vacío iluminador, está precisamente en saber aquietar la Mente, en saberla llevar al silencio.

Obviamente, se empieza el trabajo en actitud receptiva; van viniendo al entendimiento distintos recuerdos del Ego: Pasiones, traiciones, afectos, apegos, tragedias, etc., y hay que irlas comprendiendo punto a punto; hay que ver, observar, comprender...

Cuando la procesión termine, quedará quieta la Mente en el Nivel Intelectivo.

Entonces, un nuevo esfuerzo nos hará descender a la Segunda Región del Subconsciente; nuevas escenas se van vivenciando, nuevos recuerdos, etc.

Trabajar se hará indispensable, necesario, hasta comprender cada una de esas representaciones, y conseguir la quietud y el silencio de la Mente.

Un tercer esfuerzo nos llevará a la Tercera Región Subconsciente y por ese camino vamos descendiendo por una gradería, dijéramos, simbólica, de 49 pasos, hasta conseguir la verdadera quietud, el auténtico silencio.

Si creemos nosotros que ya llegamos a la quietud, y sin embargo, no adviene nada nuevo, es por que no hemos llegado.

En ese caso tenemos que descender en nuestros propios Infiernos Atómicos y retar a la Mente y recriminarla.

Primero hay que hacerle comprender, mas si no entiende, hay que recriminarla, retarla, obligarla a obedecer. (En esta palabra “Mente”, estoy sintetizando a todas las mentes juntas, a todo eso que constituye el mí mismo).

Si se consigue la verdadera quietud de fondo, en las 49 Regiones Subconscientes, el Éxtasis será inevitable, vendrá el SATORI.

En tales momento, sumergidos en el Gran Vacío Iluminador, sentiremos como si la gota se hundiera en el océano y el océano en la gota.

La Conciencia se irá expandiendo cada vez más, como se expande una gota de agua cuando cae en el mar... Descripción: http://bibliotecagnostica.net/img/small/inaudible.gif ...cada vez más profundas.

Sentiremos ser el ave que vuela; el arroyo cantarín que se desliza entre su lecho de rocas; la florecilla movida por el viento; el árbol solitario que crece en la llanura; el cometa que se desliza veloz como una gota de fuego cayendo en un abismo sin fin; la Luna que rota alrededor de su centro de gravitación; el átomo, y la molécula; el ave que ensaya el vuelo al amanecer; el Sol que nace en el Oriente y que después se oculta entre su lecho de fuego, en el Occidente.

Todo sentimiento de separatividad desaparecerá.

Vivimos, por decirlo así, entre un océano de Luz que no tiene orillas.

La Conciencia se expandirá cada vez más y más y más.

Algunas olas se destacarán entre ese océano de infinita variedad de colores: los Dioses Santos...

Pero como la conciencia tiende a expandirse cada vez más entre el gran vacío, entre el santo okidanock, viene el terror y se pierde el samadhi, el éxtasis.

Es necesario prepararnos con anticipación para no llegar a sentir tal terror; es conveniente eliminar el Yo del miedo con anticipación, para jamás llegar a temer.

Porque sería lamentable perder el Samadhi, el Éxtasis.

Si no hay temor vendrá un cambio trascendental.

Encontraremos que ese gran vacío iluminador, ese santo okidanock, tiene un centro de gravitación, un centro gravitacional, que no es otro, sino el sagrado sol absoluto, el sagrado absoluto solar, del cual emana, realmente, el santísimo okidanock, omnipenetrante, omnisciente y omnimisericordioso.

Luego vendrá lo maravilloso: Convertidos en él, o fusionados con el ain soph paranishpanna (que no es sino la estrella atómica interior que siempre nos ha sonreído), viviremos dichosos en el radiante sol espiritual de la media noche. y será allí, precisamente allí, en donde entremos a conocer la verdad final y no en ninguna otra parte.

En ese gran sol absoluto se dice que el tiempo es 49 veces más rápido que en este mundo.

Los invito a reflexionar...

Es claro, mis caros hermanos, que aquí el tiempo es 49 veces más lento, ¿por qué? porque existen 49 departamentos subconscientes y el tiempo es completamente subconsciente, subjetivo.

Cuando afirmo que es 49 veces más rápido en el Sagrado Sol Absoluto, obviamente, entonces en el Sagrado Sol Absoluto no hay tiempo, ¿verdad?

Porque si aquí es 49 veces más lento, y luego sucede que en el Sagrado Sol Absoluto le quitamos 49, queda cero, ¿verdad? (Hablo de cálculos).

Entonces en el sagrado sol absoluto, ciertamente, no existe el tiempo.

Allí el pasado y el futuro se hermanan dentro de un eterno presente.

Allí vemos al universo íntegro, con todas sus famosas edades, como un eterno instante.

Y esto es algo extraordinario.

Ciertamente en este mundo físico somos víctimas de maya (la ilusión).

samael aun weor



LA RELAJACIÓN DE LA MENTE

RELAJACIÓN DE LA MENTE
Por: samael aun weor

Vivid de instante en instante, de momento en momento, sin el doloroso peso del pasado, sin preocupaciones por el futuro.

Relajad la mente, vaciadla de toda clase de pensamientos, deseos, pasiones, etc.

No aceptéis dentro de tu mente ningún pensamiento.

¡Antes que la llama de oro pueda arder con luz serena, la lámpara debe estar bien cuidada al abrigo de todo viento!.

¡Los pensamientos terrenales deben caer muertos a las puertas del templo!.

La mente debe estar quieta por dentro, por fuera y en el centro.

Así en meditación profunda y con la mente relajada experimentareis lo real.

Entregaos a vuestro Dios Interior profundo, olvidaos completamente de la mundanalidad.

Durante la meditación mantened los párpados cerrados.

Que vuestro vehículo físico se adormezca deliciosamente.

La meditación sin sueño destruye el cerebro y daña la mente.

La meditación profunda debidamente combinada con el sueño, conduce al éxtasis, al SHAMADI.

Combinad sueño con meditación en proporciones armoniosas.

Nunca olvidéis la LEY DE LA BALANZA.

Necesitáis realmente de un 50% de sueño y de un 50% de meditación.

PRACTICAD LA MEDITACIÓN cuando os sintáis predispuestos al sueño normal.



El panadero que quiere preparar pan, deberá saber combinar las diversas cantidades de agua y harina.

Si pone más agua que harina, no le resultará el pan al panadero

Si pone mucha harina y poca agua tampoco resultara  el pan al panadero.
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En forma similar es el proceso de la Meditación.

Si ponemos más sueño que meditación, caeremos en la inconsciencia.

Si ponemos más meditación que sueño arruinaremos la mente y el cerebro.

Empero, si sabemos combinar armoniosamente sueño y meditación, lograremos eso que se llama SHAMADI, ÉXTASIS.

Quienes pretenden meditar eliminando radicalmente el sueño, se parecen aquél que intenta poner el automóvil en marcha haciendo presión violenta sobre los frenos.

Otro ejemplo os permitirá aclarar mejor todo esto.

Imaginar por un momento a un jinete sobre su cabalgadura.

Si el jinete quiere poner en marcha al caballo, deberá aflojar las riendas; más si en vez de hacer esto jala las riendas a tiempo que hiere a la bestia con las espuelas entonces habrá algo absurdo el pobre animal entrará en desasosiego; se parará sobre sus patas, relinchará y hasta arrojará con violencia al jinete.

Exactamente sucederá algo similar al devoto que intenta meditar eliminando el sueño.

La relajación mental debe ser perfecta.

Cualquier idea, deseo, pensamiento, etc., que en un instante dado se atraviese por la mente produce tensiones y esto no es relajación.

El relajamiento perfecto de la mente excluye deseos, ideas, pensamientos, recuerdos, pasiones, etc.

Vaciar la mente, convertirla en un pozo sin fondo, profundo, es realmente relajarla.

La mente superficial es semejante a un charco en el camino; cuando sus aguas se evaporan  bajo los rayos solares, solo queda el lodo y la podredumbre.

La mente profunda relajada maravillosa,  es como un lago insondable, donde viven innumerables peces y hay vida en abundancia.

Cuando alguien lanza una piedra a un lago apacible y sereno, se producen ondas rutilantes que van desde el centro hacia la periferia esa es la reacción del agua ante el impacto proveniente del mundo exterior.

Similarmente diremos que la mente relajada es como un lago apacible y sereno donde se refleja el panorama del universo.

Los impactos provenientes del mundo exterior al caer en el lago de la mente originan ondas que van desde el centro a la periferia.

Esas ondas agitan la mente de los anacoretas y les llevan al fracaso, la mente debe ser controlada desde el centro a fin de que nunca reaccione ante los impactos provenientes del mundo exterior.


samael aun weor